Esta transparencia se extiende a otras estrellas de la telerrealidad, dijo Sarwer. Las mujeres de los programas The Real Housewives se han sometido a todo tipo de intervenciones, desde rellenos de labios hasta rejuvenecimiento vaginal.
Parte del nuevo despliegue de mejoras estéticas tiene que ver con el estatus: cuando te haces rellenos faciales como las Kardashian estás diciendo que estás a su nivel, dijo Sarwer. Lund comentó que ahora “todo el mundo quiere una mandíbula increíblemente afilada y un cuello muy marcado”, y una de las celebridades cuya mandíbula y barbilla es más admirada por sus pacientes es Evan Rachel Wood, de Westworld, una serie en la que la actriz interpreta a un androide sensible.
Pero en parte también se debe a que la definición de “autocuidado” se ha ampliado tanto que ahora incluye ponerse inyecciones en el rostro cada seis meses para no verse “cansado”, dijo Maggie Reid, de 33 años, profesora adjunta de periodismo en la Universidad de Toronto Scarborough y presentadora del pódcast Generation Botox.
Reid no cree que la nueva transparencia sobre la cirugía plástica haya hecho que los estándares de belleza sean menos opresores. “Sabemos que las celebridades tienen entrenadores, dietas especiales e intervenciones cosméticas para lucir de esa manera, pero ese no es el punto. Es este ideal de belleza que se va acrecentando y que nadie puede alcanzar sin intervenciones, y la cirugía plástica cada vez se vuelve más una parte de esa rutina de belleza normalizada”, expresó.
Lorry Hill, una creadora de YouTube, cree que muchas personas que están en el ojo público aún no son del todo transparentes sobre las modificaciones corporales y faciales que se realizan, incluidas las Kardashian. En su canal de YouTube, que cuenta con más de 200.000 suscriptores, Hill disecciona a detalle los procedimientos que, según ella, se han hecho varias celebridades, y al final también hace un recuento meticuloso del precio. Aclara que no es una cirujana plástica ni una experta, sino una entusiasta. Sus videos tampoco están verificados por un cirujano o un médico. En su biografía de YouTube, señala: “Por favor, acude a un cirujano plástico para recibir asesoramiento médico”.
Pero eso no impide que la gente vea su canal de manera obsesiva. Hill, que tiene 43 años y vive en Las Vegas, dice que hace estos videos para mostrar todo el trabajo que hay detrás de la imagen perfecta de una celebridad.