El domingo, los Jefes de Kansas City ganaron su tercer Super Bowl en las últimas cinco temporadas al vencer 25-22 a los 49ers de San Francisco en tiempo extra. Y, aunque algunos jugadores de la NFL pasan toda su carrera sin ganar un campeonato, alguien que acaba de llegar a Kansas City probó las mieles de la victoria en su décimo tercer partido.
Taylor Swift, quien ha estado saliendo con Travis Kelce, el ala cerrada estrella de Kansas City, cambió la conversación de la NFL durante toda la temporada, pues atrajo a un nuevo público a la liga e inspiró fuertes emociones (tanto positivas como negativas) entre los aficionados. Y, como era de esperarse, estuvo en el estadio animando a Kelce y a los Jefes en su remontada victoriosa.
Después del partido, Swift celebró en el campo con Donna Kelce y el resto de los familiares y amigos de Kansas City, mientras Travis Kelce cantaba una versión realmente memorable de “Viva Las Vegas”.
Luego, se encontró con Kelce para celebrar después de que el jugador diera su discurso.
“Fue increíble”, le dijo Swift a Kelce en un video grabado en el campo después del juego. “Fue una de las cosas más locas que he vivido”.
Después del juego, a Kelce, quien espera celebrar con sus compañeros de equipo en el desfile de victoria en Kansas City el miércoles, le preguntaron que si podía pensar en una pareja que hubiera tenido una mejor semana que la de ellos, con los dos Grammy que ganó Swift y su victoria en el Super Bowl.
“Es como estar en la cima del mundo”, respondió. “Se siente genial”.